ORACION MAGICA PARA ATRAER, CONQUISTAR Y CONSEGUIR A LA PERSONA AMADA

+ Jahel, + Patriteron, + Israel, + Aglala, +
Xiday, + Rosael, + Helim, + Agla, + Tetragrámmaton,

yo os adoro y os amo sabios eones,
acudo a cada uno de vosotros en estos instantes
para pedir vuestra influencia benefactora,
vosotros que ponéis en comunicación
la materia y el espíritu
llegad hasta .......
(nombre de la persona que se quiere conquistar),
y haced que se fije en mi ....... (tu nombre).

Os ruego, seres divinos y eternos
me ayudéis a atraer y conquistar
a la persona que de la estoy enamorado-a,
que me asistáis para que pueda conseguir su amor,
y que con mis cualidades y buenos sentimientos 
pueda llegar hasta su mente y corazón
y sienta atracción hacia mi. "In laudem et honorem Dei ae proximi utilitatem.

Dominum hon invocaverunt illie trepidaverum
timore, ubi non erat timor". +

¡Oh, Excelsa y Divina Trinidad del Padre Criador,

del Hijo Redentor
y del Espíritu Santo Glorificador! +

Alfa y Omega. +

Oh, poderoso Adonay

a tu bondad infinita acude

y se postra humildemente esta criatura ....... (tu nombre) 

y de todo corazón y con esperanza, te pide que:

....... (nombre de la persona a quien se conquistar)

se enamore de mi,

no fijándose en la hermosura de mi cuerpo,

sino en la belleza de mi alma.

+ Jahel, + Patriteron, + Israel, + Aglala, +
Xiday, + Rosael, + Helim, + Agla, + Tetragrámmaton,

yo os adoro y os amo.

Haced, poderosos Eones,
que pueda conquistar a la persona que amo .......,
que quede seducido-a por mi afecto y sensibilidad,
que sienta fascinación por mi persona;
quiero que piense en mi y olvide otros amores,
sé que a mi lado puede ser feliz
y podemos tener una vida en común maravillosa;
poderosos eones acercad nuestros destinos
y alejad todos los obstáculos que nos separan,

que el amor que siento por vosotros

influya en el corazón de la criatura
que quiero hacer mía.

+ Así sea.

Rezar nueve Padrenuestro, nueve Avemaríasy sus glorias correspondientes. 

Hacer la oración y los rezos tres días seguidos,
por la mañana y por la noche.
Encender una vela blanca o celeste cada día,
por la mañana, y dejar que se consuma.